Al empezar un año nuevo, no puedo evitar pensar como era todo antes de la llegada de la pandemia. Muchas cosas cambiaron, algunas para bien y otras para mal, pero aun así cambio la vida atrayendo bastante mala suerte. Puedo recordar aquel fatídico día en que comenzó la tragedia, no soy de las personas que vean muchos las noticias, y lo poco que veía del tal “corona” eran videos en Instagram de personas asiáticas enfermas. Nunca entendí estos videos y tampoco les prestaba atención pues nadie quiere ver personas enfermas, este punto contribuye a lo mucho que me afecto. Cuando empezó al año 2020, sentía que podía dominar el mundo, estaba viviendo en las residencias universitarias, podía salir y explorar los lugares interesantes de San Juan y las ciudades adyacentes, había logrado entrar en el tan deseado “Disney Collage Program” y por primera vez asistiría a la gran “Comic-Con” de Puerto Rico, incluyendo la llegada de un artista que tanto deseaba conocer. Todo iba tan perfecto hasta aquel 12 de marzo, en el que recibí la noticia de que la universidad cerraría, desde ahí todo siguió hundiéndose. Aquel peligro que se veía tan distante había llegado para quedarse, al principio no lo quise creer, solo esperaba que acabara pronto, pero no fue así.
Todo empezó a cancelarse. Primero la “Comic-Con”, después el “Disney College Program”, y finalmente cada salida posible por haber, no era de las que salía mucho, pero el encierro me hizo querer salir con desesperación. Sentí que el mundo me odiaba y toda esa confianza y determinación que tanto me costó construir simplemente se quebró. Sabía que mis problemas no eran los peores y eran mayormente superficiales, pero nunca pude dejar de pensar en la mala suerte que me seguía, y para las clases fue peor. Admito que al principio fue ventajoso aprender desde la comodidad de las casas, pero con el tiempo todo empeoraba, muchas veces siento que realmente no estoy aprendiendo nada, cosa que empeora con esas clases asincrónicas y de estudio independiente. Siento que cada vez se vuelven más complicadas, así que lo único que hago es resistir y esforzarme al máximo. De esta pandemia, para mí, no provino algo tan positivo, lo máximo, que al fin pude leer algunos de los tantos libros que conservo y ponerme al día con series olvidadas.
